HOMENAJE AL P. ALFONSO MORENO GONZÁLEZ COMO ASISTENTE DE LA FEDERACIÓN “MATER ET DECOR CARMELI”

El día 27 de enero de 2024 será un día inolvidable para muchos carmelitas, religiosos y monjas que pudimos asistir y participar en un sencillo y fraterno homenaje al P. Alfonso Moreno González, asistente religioso de la Federación “Mater et Decor Carmeli” durante más de veinte años. Todo transcurrió en nuestro convento de Jerez de la Frontera.

El día amaneció precioso y el frio del invierno nos dio una tregua. A eso de las diez y media de la mañana llegó el primer grupo de Monjas, procedentes del Monasterio de Córdoba. Después, poco a poco, fueron llegando los demás grupos. Todos los Monasterios de la Federación “Mater et Decor Carmeli” de la Provincia Bética en España estuvieron representados, a excepción del de Utrera, que se excusó por motivos particulares. Un total de treinta monjas Carmelitas, a las que se añadieron algunas contemplativas: Agustinas, Esclavas del Santísimo y Mínimas de Jerez de la Frontera. Saludos y mucha alegría. “¡Oh, ¡qué bueno y qué dulce habitar los hermanos unidos!”.

La celebración eucarística dio comienzo a las 12 am. Antes, mientras las hermanas visitaban el Museo Carmelitano, habíamos dispuesto los bancos de la Basílica para que todos pudieran participar desde la cercanía. Como asamblea estaban: las monjas, la familia del P. Alfonso (su hermana, su cuñado y tres sobrinos), dos matrimonios y dos personas allegadas a la comunidad. Se pretendió, desde el principio, que fuera un acto íntimo y discreto.

El P. David del Carpio, nuestro Prior Provincial, presidió la Eucaristía, concelebrando con él los religiosos sacerdotes de la comunidad de Jerez, el P. José Peralbo Ranchal, de la comunidad de Sevilla, y el P. Francisco Daza Valverde, asistente actual de la Federación. Fray Fernand, profeso simple y Renau, postulante carmelita, ayudaron como acólitos.

La madre Federal, Sor María Dolores Domínguez, en la monición de entrada a la celebración, dirigió unas hermosas y agradecidas palabras a Dios y a Nuestra Madre del Carmen por todo lo que habían hecho en favor de la Orden y de la Federación. Ahora – nos dijo – estábamos recogiendo el fruto de tantos desvelos vividos por las Monjas que concibieron el proyecto de la Federación y estuvieron acompañadas y asesoradas durante tantos años por el P. Alfonso Moreno González.

Por su parte, en la homilía, el homenajeado, con la vitalidad y alegría que le son propias, agradeció la presencia y oración de todos los presentes y centró sus palabras, particularmente, en el misterio de la vocación consagrada. Dios llama a quien quiere, cuando quiere y como quiere. En su vida, nos recordó el P. Alfonso, que él había experimentado que todo es gracia. El no había hecho sino corresponder, desde su fragilidad humana, a todo lo que el Señor le había ido confiando. También recordó que la vocación primera de todo cristiano es la santidad, vivida en lo cotidiano. Dirigiéndose particularmente a las monjas, les pidió que no renunciaran a su maternidad espiritual.

Después de saludar a Nuestra Madre del Carmen Coronada con el “Flos Carmeli”, concluyó la celebración. Antes de abandonar el templo, nos hicimos alguna que otra foto de recuerdo.

El acto continuó con un aperitivo en el patio del convento y con la comida fraterna en el comedor de la comunidad.

Antes del postre, las hermanas, en la persona de la Madre Federal, Sor María Dolores, ofrecieron algunos regalos al P. Alfonso. Destacó un anuario con fotos, recuerdos y dedicatorias de cada uno de los monasterios. Los cantos preparados para la ocasión hicieron que la pequeña sobremesa resultara igualmente hermosa y fraterna.

A eso de las 16,30, las monjas comenzaron a abandonar el convento para volver a sus monasterios respectivos.

Gracias a todos los que estuvieron presentes en este acontecimiento, físicamente o desde la oración. Gracias, particularmente, a la comunidad carmelita de Jerez de la Frontera y al personal de servicio que, como siempre, prepararon todo con esmero y cuidaron todos los detalles.

Realmente, fue un día muy bonito. Una de esas ocasiones que no se olvidarán fácilmente y que nos permiten recordar que, lo que se siembra con amor, siempre da fruto abundante. El Dueño de la mies nos gana en generosidad.  

 

Francisco Daza Valverde, O. Carm.


Desde nuestro BLOG felicito muy cordialmente a nuestro querido Padre Alfonso con quien he caminado tantos años hasta llegar a la cumbre de nuestra Ordenación Sacerdotal en el Colegio Carmelita de San Andrés de Salamanca, el 25 de abril de 1965, fiesta de San Marcos.










 

 

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