----------------------------------
COMUNIDAD CARMELITA DE
SEVILLA 2024
----------------------------------
DOMINGO DE RAMOS
El pórtico de la Semana Santa es el DOMINGO DE RAMOS, en la
Pasión del Señor.
Este Domingo
tiene dos dimensiones que mutuamente se complementan:
UNA, que se
manifiesta en la procesión, con cantos de exultación y
alabanza de toda una multitud que, con palmas y ramas de olivo, aclama a Jesús
como Mesías victorioso. La procesión, más que un recuerdo histórico, es una
solemne profesión de fe. Cf. Mc 11,1-10).
¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Bendito el reino que llega, el de
nuestro padre David! ¡Hosanna en las alturas!
OTRA, que se
refleja en las lecturas de la Eucaristía, con el anuncio del
sufrimiento de Jesús.
El color rojo de las vestiduras de este día nos está diciendo que estamos ante la Muerte de un
mártir y de su Victoria.
El profeta
Isaías habla del “Siervo del Señor”, como varón de dolores. La misión profética del Siervo consiste en llevar una palabra,
de aliento y esperanza, al cansado y abatido. Para llevar a cabo esta misión ha
recibido del Señor una lengua de iniciado.
La descripción
del mensaje del Siervo del Señor encuentra su plena realización en la PASIÓN Y MUERTE DE JESÚS (Mc 14, 1-15, 47).
La lectura de
San Pablo a los Filipenses es un himno
litúrgico en el que se expresa el doble movimiento
que determina el itinerario pascual de Jesús; obediente a la voluntad del
Padre, se humilla hasta la muerte de cruz, pero el Padre lo constituye Señor
sobre todos los poderes. De este modo, el Padre es plenamente glorificado y el
mundo salvado. (Fil 2,6-11).
Cristo se sometió a la muerte, por nosotros y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levanto sobre todo y le concedió el “Nombre-sobre-todo nombre.”
Comentarios
Publicar un comentario