SEMANA SANTA 2025


Celebración del del Domingo de Ramos dándole la máxima solemnidad y participación al pueblo en la Misa de 12:30 horas, que es la principal del Domingo. Se bendicen los ramos, fuera del templo, después se hace una pequeña procesión entrando a la Iglesia tras la cruz procesional, con incienso, moniciones, y cantos. Durante la Eucaristía se proclama la Pasión del Señor por tres sacerdotes de nuestra comunidad y se concluye con la homilía del Presidente de la celebración. Después, se continua la Misa con su ritmo normal hasta la conclusión.

La celebración del Jueves Santo la comenzamos a las 17:00 horas. Se procura la participación de la asamblea a través de los cantos y moniciones. Al final nos dirigimos al monumento donde se reservó el Señor hasta el día siguiente.

La celebración del Viernes Santo la comenzamos a las 17:00 horas con la austeridad propia de este día. La Liturgia de la Palabra concluye con la Oración Universal. Previamente se proclama la Pasión del Señor por tres sacerdotes de la Comunidad. La 2ª parte comienza con la adoración de La Cruz y la 3ª parte concluye con la Sagrada Comunión.

La celebración de la Vigilia Pascual comienza a las 19:30 horas con el rito del Lucernario, fuera de la Iglesia, como Primera parte. Se bendice el fuego y se enciende el Cirio Pascual. Se entra procesionalmente en la Iglesia y se canta el Pregón pascual. A continuación comienza la 2ª parte con la Liturgia de la Palabra. La proclama la Palabra acompañada de moniciones y cantos. Terminada esta 3ª parte, comienza la Liturgia Bautismal en donde se bendice el agua, se renuevan las promesas del Bautismo y se termina con la aspersión al pueblo de Dios. Comienza la Cuarta Parte con la Liturgia Eucarística, la distribución de la Comunión y los cantos pascuales y de felicitación.



DOMINGO DE RAMOS

 

El pórtico de la Semana Santa es el DOMINGO DE RAMOS, en la Pasión del Señor.
Las características propias de este día pueden ayudarnos a descubrir el sentido que tiene siempre cada Domingo.
-la procesión: es como una aclamación ante la victoria del Señor. No es tanto un recuerdo histórico cuanto una solemne profesión de fe.
-la lectura de la Pasión: subraya el hecho de que la victoria de Cristo se obtiene a través del sufrimiento y de la muerte.
-las palmas y los ramos: popularmente son signos de victoria y manifiestan que, la muerte en la cruz es camino de victoria, por cuanto esta muerte destruyó la muerte.
La celebración de hoy resume la dinámica del misterio Pascual de Cristo, que es también el contenido de nuestra celebración dominical.

CRISTO Y SU ENTRADA MESIÁNICA EN EL REINO.
Llegada la “hora”, Jesús decide ir a Jerusalén. Y su entrada es, a la vez, la entrada del Siervo que camina hacia la muerte y que tras la muerte va a ser glorificado.
El sentido fundamental de la procesión es: celebrar la entrada mesiánica del Señor, en su triunfo pascual, a través de la muerte.
El color rojo de las vestiduras, en este día, apunta a la Muerte del mártir y de su Victoria.
El Domingo de Ramos abre la Semana Santa de la Pasión del Señor. Por este motivo leemos hoy toda la Pasión.
Jesús es el único que ha entendido, en profundidad, a los profetas. Su entrada en Jerusalén tiene un claro significado mesiánico.
En este cortejo triunfal, él camina, obediente a la muerte, y muerte de cruz.
Con la bendición y procesión de ramos conmemoramos la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén, como Rey-Mesías victorioso. Acompañamos jubilosos a Jesús, agitando los ramos y proclamando con cantos su victoria:

Hosanna al Hijo de David, 
Bendito el que viene en nombre del Señor, el rey de Israel
¡Hosanna en el cielo!

 

SALMO 23
Entrada solemne de Dios en su templo
1Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe, y todos sus habitantes:
2él la fundó sobre los mares,
él la afianzó sobre los ríos.

3-¿Quién puede subir al monte del Señor?
¿Quién puede estar en el recinto sacro?
4-El hombre de manos inocentes,
y puro corazón, que no confía en los ídolos
ni jura contra el prójimo en falso.

5Ése recibirá la bendición del Señor,
le hará justicia el Dios de salvación.
6-Éste es el grupo que busca al Señor,
que viene a tu presencia, Dios de Jacob.

7¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria.

8-¿Quién es ese Rey de la gloria?
-El Señor, héroe valeroso;
el Señor, héroe de la guerra.

9¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria.

10-¿Quién es ese Rey de la gloria?
-El Señor, Dios de los ejércitos.
Él es el Rey de la gloria.

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, 
como eran en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.

SANTA MISA

La Eucaristía apunta al drama de la cruz y, sobre todo, a la Pasión del Señor.

PRIMERA LECTURA
No oculté mi rostro a insultos y salivazos…, y sé que no quedaré avergonzado.
(Tercer cántico del Siervo del Señor)

LECTURA DEL PROFETA ISAÍAS  50, 4-7

SALMO RESPONSORIAL
SALMO 21: En este Salmo se acentúan las características del Siervo.

SEGUNDA LECTURA
Se rebajó a sí mismo; por eso Dios lo levantó sobre todo
LECTURA DE LA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS FILIPENSES 2,6-11

EVANGELIO
Cristo por nosotros se sometió a la muerte, y una muerte de cruz. 
Por eso Dios lo levanto sobre todo, y le concedió el “Nombre-sobre-todo nombre.”

PASIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
SEGÚN SAN MATEO 26,14; 27,66

***

HIMNO DE VÍSPERAS
¿Quién es este que viene,
recién atardecido,
cubierto por su sangre
como varón que pisa los racimos?
Éste es Cristo, el Señor,
convocado a la muerte, glorificado en la resurrección.

¿Quién es este que vuelve,
glorioso y malherido,
y, a precio de su muerte,
compra la paz y libra a los cautivos?
Éste es Cristo, el Señor,
convocado a la muerte, glorificado en la resurrección

Se durmió con los muertos,
y reina entre los vivos;
no le venció la fosa,
porque el Señor sostuvo a su Elegido.
Éste es Cristo, el Señor,
convocado a la muerte, glorificado en la resurrección

Anunciad a los pueblos
qué habéis visto y oído;
aclamad al que viene
como la paz, bajo un clamor de olivos. Amén.





JUEVES SANTO
 


EL JUEVES SANTO ES COMO LA INTRODUCCIÓN AL TRIDUO PASCUAL DEL SEÑOR:

Viernes =  día de la Muerte
Sábado =  día de la Sepultura
Domingo= día de la Resurrección del Señor

En la Eucaristía de esta tarde celebramos la “CENA DEL SEÑOR”, el Memorial de su “entrega a la muerte” por AMOR a la humanidad.
La Eucaristía del Jueves Santo tiene, pues, una relación muy clara con la Muerte y Resurrección del Señor. Es como una profecía de la Pascua, su celebración es Sacramental. Introduce una celebración que culminará en la solemne  VIGILIA PASCUAL, la principal de todo el año.
JESÚS llevó a su plenitud la Pascua judía; en el momento cumbre de la Cena se dirigió a sus Apóstoles y les dijo: “este PAN” ya no será para vosotros el signo de la salida de Egipto, el paso de la esclavitud a la libertad, SINO que “este PAN es mi CUERPO” que se entrega a la muerte por vosotros.
Y esta COPA DE VINO no será ya para vosotros el Memorial de la alianza del Sinaí, SINO que “esta COPA DE VINO es mi SANGRE”, la de la Nueva y Eterna Alianza que será derramada por vosotros.
Jesús instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio al mandar a sus Apóstoles que hiciesen su Memorial:
“Haced esto en memoria mía”.
En la Iglesia primitiva, el jueves por la mañana, el Obispo acogía a los penitentes públicos que durante la Cuaresma se habían ejercitado en las prácticas de penitencia. Una vez reconciliados podían ya celebrar la Pascua



VIERNES SANTO
 


EL CENTRO DE LA CELEBRACIÓN DE HOY ES LA CRUZ
Los ornamentos rojos nos están hablando que estamos ante un mártir y no ante las exequias de un difunto. Jesús ha ido voluntariamente a la muerte para salvar a la humanidad.
Jesucristo, como Sumo Sacerdote, en nombre de toda la humanidad se ha entregado voluntariamente a la muerte para salvar a todos.
La memoria de la Muerte de hoy está ya preñada de esperanza y de victoria…Y será la Vigilia de la Resurrección la que nos recuerde todo el dinamismo del paso, de la Muerte a la Vida.
Características de este día son:
-AYUNO, austeridad y sobriedad: no hay Misa, ni flores, ni altares vestidos, ni música, ni repicar de campanas.
“La comunidad cristiana ora y medita en la Pasión del Señor”.
El ayuno de hoy no es penitencial SINO Pascual. La Iglesia ayuna porque falta el esposo (Cristo), pero camina con la esperanza de que su paso por la muerte desembocará en la victoria de la Resurrección.

La celebración de hoy consta de tres partes:
1.-Liturgia de la Palabra
2.-Adoración de la Cruz
3.-Sagrada Comunión
Se inicia con el rito de entrada en el que los Ministros, vestidos de rojo, se dirigen al presbiterio y se arrodillan, permaneciendo un rato en silencio.
Con este rito se significa, tanto la humillación del “hombre terreno”, como la tristeza y el dolor de la Iglesia

1.-Liturgia de la Palabra
a.-La lectura de la Pasión es el centro de la celebración de la Palabra
Las lecturas 1ª y 2ª preparan a la comunidad para entender todo el sentido de la Pasión.
El cuarto Canto del Siervo, en el que Isaías anuncia toda la tragedia y grandeza de la entrega del Siervo por los demás, así como la reflexión del autor de la carta a los Hebreos sobre Jesús, quien experimenta en sí mismo toda la angustia de la muerte salvadora, ofrecen la mejor clave para escuchar, con pleno sentido, la PASIÓN del Señor.
Conclusión.-La muerte de Cristo es victoriosa. El Siervo asume el dolor de la humanidad para salvación de todos. María, junto a la cruz, es testigo excepcional del misterio de dolor y de misericordia.

b.-La Oración Universal tiene hoy un especial relieve: 
Toda la humanidad es puesta a los pies de la Cruz.
El Pueblo de Dios celebra cómo Cristo Jesús se ha entregado a la muerte por la salvación de todos, como sacerdote y mediador de una nueva alianza. Este Pueblo, participando del sacerdocio de su Señor, intercede por las grandes intenciones de la Iglesia y de toda la humanidad.
-Con la oración Universal concluye la liturgia de la Palabra.

2.-Adoración de la CRUZ
El centro de la celebración de hoy es la Cruz. Levantamos la Cruz victoriosa del Señor para adorarla. En la cruz, Jesús venció todo mal, todo lo que hay de muerte en nosotros. El Viernes Santo es el día de la “Cruz gloriosa”; del árbol de la Cruz brotó la Vida. La Liturgia no disocia la Muerte de la Resurrección.

3.-Sagrada Comunión: Hoy no hay Misa, pero comulgamos de la reserva del Jueves Santo.


REFLEXIÓN PERSONAL: El Cristo de la PASIÓN

Reproducimos a continuación la imagen del Cristo de la película “Pasión de Cristo” de Mel Gibson, junto con la poesía de Gabriela Mistral que trae la Liturgia de las Horas como himno de Vísperas  del Viernes de la 1ª Semana ( tomo 4º p.629). 
Tanto la imagen del Cristo como la poesía, me parecen muy apropiadas para la meditación de este Viernes Santo. 

La imagen del Cristo me recuerda la impresión que le produjo a Teresa de Jesús la contemplación de la imagen, de un Cristo muy llagado, que vio en el oratorio del Convento que, “en mirándola, toda me turbó de verle tal, porque representaba bien lo que pasó por nosotros…” (Vida, c.9,1-3).
A partir de aquel momento, la santa decidió “tomar una determinada determinación” por Dios.
Y, sobre todo, la imagen del Cristo llagado de la película “Pasión de Cristo” de Mel Gibson es la fiel reproducción de lo que describe el profeta Isaías en el cuarto canto del Siervo del Señor: 
“Lo vimos sin aspecto atrayente, despreciado y evitado por los hombres, como un hombre de dolores, acostumbrado a sufrimientos, ante el cual se ocultan los rostros, despreciado y desestimado…” (Isaías 52,13-53,12.).

Esta misma impresión la reproduce la obra de la Pasión de Jesucristo según San Mateo de Juan Sebastián Bach en el siguiente párrafo:

“Oh rostro ensangrentado de Cristo, el Señor.
Cabeza circundada de afrenta y de dolor. 
Contritos contemplamos tu pena y tu aflicción.
 Acoge nuestro llanto, oh Cristo Salvador" 

AL CRISTO DE LA PASIÓN

El Cristo de la Pasión
es el fruto del pecado, 
del hombre que se obcecó
en dar muerte a su Amado.

Es un misterio de amor
de la entrega generosa
de todo un Dios Redentor
que creó todas las cosas

El Cristo de la Pasión,
sigue llamando a tu puerta
día y noche, sin descanso
a través de la conciencia- 

Al ladrón arrepentido 
y al centurión que observó 
cómo murió aquel hombre, 
el Paraíso les dio.

Y su imagen la grabó
 en la sábana y el velo
de un hombre y una mujer,
como misterio del cielo.

José Candelario 

     


En esta tarde, Cristo del Calvario,
vine a rogarte por mi carne enferma;
pero, al verte, mis ojos van y vienen
de tu cuerpo a mi cuerpo con vergüenza.

¿Cómo quejarme de mis pies cansados,
cuando veo los tuyos destrozados?
¿Cómo mostrarte mis manos vacías,
cuando las tuyas están llenas de heridas?

¿Cómo explicarte a ti mi soledad,
cuando en la cruz alzado y sólo estás?
¿Cómo explicarte que no tengo amor,
cuando tienes rasgado el corazón?
Ahora ya no me acuerdo de nada,
huyeron de mi todas mis dolencias.
El ímpetu del ruego que traía
se me ahoga en la boca pedigüeña.

Y sólo pido no pedirte nada,
estar aquí junto a tu imagen muerta,
 ir aprendiendo que el dolor es sólo
la llave santa de tu santa puerta



SÁBADO SANTO
 


La Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su Pasión y Muerte. Hoy no hay Misa, quedando desnudo el altar hasta la solemne Vigilia Pascual.

PUNTOS DE REFLEXIÓN:
1.-Una celebración en lo profundo del alma por cuanto tiene de misterio: “la ausencia del Señor”.
-no hay Eucaristía
-ni se proclama la Palabra
-el Señor ha muerto…, está ausente…, misteriosamente muerto.
- experiencia de vacío ante la ausencia de un amigo. La misma que sentimos cuando se nos muere un ser querido.
- enmudecimiento ante un gran dolor como el que experimentaron los amigos de Job cuando fueron a visitarlo: "Luego se sentaron en el suelo, junto a él, durante siete días y siete noches. Y ninguno le dijo una palabra, porque vieron que el dolor era muy grande” (Job 2,13).

2.-Una Liturgia de meditación. (Cf. Liturgia de las Horas. 2ª lectura de este día: Homilía antigua sobre el grande y Santo Sábado).
-Sepultura del Señor en un jardín…, evocación del jardín del Paraíso donde fue colocado Adán, y del jardín del Esposo del Cantar de los Cantares.
-El Señor descansa., el rey reposa., tu fiel no experimentará la corrupción., su carne descansa serena.
-El Señor desciende al abismo y se encuentra con los justos. 
-Encuentro  con Adán, la oveja perdida, padre de la humanidad. 

3.-La Iglesia, como María, permanece silenciosa ante la ausencia del Señor.
-Privilegiar, en este día, la celebración del Oficio de lectura.


VIGILIA PASCUAL
 

¡JESUCRISTO HA RESUCITADO, ALELUYA! 
Este es el día en que actuó el Señor. Hoy es la Pascua del Señor y también es nuestra Pascua, pues, en la muerte de Cristo ha sido vencida nuestra muerte. Y en la Resurrección de Jesucristo hemos resucitado nosotros a través de los Sacramentos.
Los grandes signos de esta noche son:
“LUZ, PALABRA, AGUA, PAN Y VINO”.

LA CELEBRACIÓN CONSTA DE CUATRO PARTES:
1.-Fiesta del fuego y de la luz.
Cristo, bajo el signo del Cirio, brilla en medio de las tinieblas con nueva vida y contagia a toda la Comunidad.
-Pregón pascual: Invitación a la alegría de la fiesta por la victoria de Cristo, en el que se han cumplido las promesas del A.T., ha nacido la Iglesia y nos ha prometido su venida al final de los tiempos. Maravillosa síntesis de la Historia de la Salvación.

2.-Liturgia de la Palabra:
Del Antiguo Testamento: -3 lecturas de la LEY: Creación, Sacrificio de Abrahán y Paso del Mar Rojo.
-4 lecturas de los Profetas: dos lecturas de Isaías, Baruc y Ezequiel: Una llamada al amor renovador.
El paso al Nuevo Testamento se resalta con el canto del GLORIA y del ALELUYA antes del EVANGELIO. LA Historia de la Salvación avanza rítmicamente desde la Creación hasta la Resurrección de Jesucristo.

3.-Liturgia Bautismal.
Después de haber escuchado la palabra de Dios, que nos anunciaba la vida nueva de Jesucristo, ahora, esta vida nueva se nos hace signo visible. A través del agua del Bautismo nos incorporamos a Jesucristo, el agua que nos hace hijos de Dios. La noche de Pascua es el momento ideal para celebrar los sacramentos de la iniciación cristiana. A través de las aguas del Bautismo nos incorporamos a Jesucristo, a su Muerte y Resurrección, como nueva criatura.

4.-Liturgia de la Eucaristía: 
Es la culminación de toda la Noche Pascual. Es la Eucaristía central de todo el año. Cristo, el Señor Resucitado, nos hace partícipes de su Carne y de su Sangre, como memorial de su Pascua. Cristo Resucitado nos invita al Banquete de Bodas, a comer su CUERPO y a beber su SANGRE, como verdadero alimento de vida eterna.

CINCUENTENA PASCUAL

EL TIEMPO PASCUAL COMPRENDE 50 DÍAS, VIVIDOS Y CELEBRADOS COMO UN SOLO DÍA
 


Dice San Atanasio: “Los 50 días que van desde el Domingo de Resurrección hasta el Domingo de Pentecostés se han de celebrar con alegría y exultación, como si se tratase de un solo y único día festivo, como un gran Domingo”.
Con la reforma del Año Litúrgico, la Cincuentena Pascual ha vuelto a ser otra vez “el tiempo simbólico que recuerda a Cristo Resucitado, presente en su Iglesia, a la que hace donación de la promesa del Padre, el Espíritu Santo” (Cf Lc 24,49; Hch 1, 4; 2, 32).
El tiempo de Pascua es un tiempo fuerte del Año litúrgico, de más importancia que la Cuaresma, a la que supera en tiempo y simbolismo.
La Cuaresma dura cuarenta días y, es figura de esta vida, de prueba y de tentación.
La Cincuentena Pascual dura cincuenta días y, es figura de la eternidad.
Cristo, en su Misterio Pascual, ha pasado a una nueva forma de existencia. Ha sido constituido “Señor” y “Primogénito” de toda la creación. Ha entrado, definitivamente, en la esfera del Espíritu. Y, como este “PASO”(Pascua) lo ha dado como Cabeza de la nueva humanidad, se ha convertido en modelo y prototipo de lo que la Iglesia entera, la comunidad de creyentes, deberá realizar.
Cristo es el “Hermano Mayor, que ha recorrido el camino a la nueva Vida y se ha convertido en el “Príncipe de la Vida” (Hch 3,15), en el “Primogénito de entre los muertos”(1Co 15).
Los cristianos vamos desarrollando, en la historia, la Pascua de Jesús. La Pascua se ha cumplido en Cristo, nuestra Cabeza, pero todavía tiene que cumplirse en nosotros. El Paso al Padre y a la nueva existencia se continúa en nosotros. En este sentido, podemos decir, que la Pascua no está terminada.


LA CINCUENTENA PASCUAL:

1.-Simbolismo de la luz y 2.-Simbolismo del agua

1.-Simbolismo de la luz
Durante la Cincuentena Pascual, el Cirio debe iluminar todas las celebraciones de la Comunidad cristiana: Eucaristía, Sacramentos, Liturgia de las Horas. Iluminación que deberá prolongarse hasta la tarde de Pentecostés.
En el Sacramento del Bautismo y en la Misa de Exequias deberá encenderse el Cirio Pascual:
-En el Bautismo, como recuerdo simbólico de la incorporación a la Muerte y Resurrección de Cristo.
En el rito del Bautismo, los padres encienden una pequeña vela del Cirio pascual y, a continuación, el Presidente les exhorta diciendo:
“Que vuestros hijos, iluminados por Cristo, caminen siempre como hijos de la luz”.
-En las Exequias se enciende también el Cirio, dando de este modo, un tono pascual al momento culminante de la vida cristiana. El que comenzó  su camino de fe a la luz de Cristo, lo concluye con la misma luz.

2.-Simbolismo del agua.
Para la iglesia, el símbolo del agua es, fundamentalmente, Bautismal. Esto lo vemos:
- En la aspersión que inaugura la consagración de una Iglesia: “Santifica con tu bendición esta agua…, para que rociada sobre nosotros y sobre los muros de esta Iglesia, sea señal del bautismo, por la cual, lavados en Cristo, llegamos a ser templos de tu Espíritu”.
- Al inicio de la Unción de Enfermos: “Que esta agua nos recuerde nuestro Bautismo en Cristo, que nos redimió con su Muerte y resurrección”.
- En las oraciones de la bendición del agua, antes del bautismo, se hace memoria de las maravillas realizadas por Dios en las aguas de la Creación, en las del Diluvio, en las del Mar Rojo y en las del Jordán, dando paso a una vida nueva.
La última oración concluye diciendo:
“Te pedimos, Señor, que el poder del Espíritu Santo, por tu Hijo, descienda sobre el agua de esta fuente, para que los sepultados con Cristo, en su muerte, por el Bautismo, resuciten con él a la Vida. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

Lecturas del Nuevo Testamento. Durante la Cincuentena Pascual, se proclaman las lecturas del Nuevo Testamento, ya que la Pascua es tiempo de plenitud, novedad, y cumplimiento, mientras que el Antiguo Testamento es promesa y figura. Se hacen lecturas de los Hechos de los Apóstoles, las Cartas de San Pedro, la 1ª carta de San Juan, Apocalipsis y Evangelio de San Juan. Todos estos libros se caracterizan por tener una dimensión pascual y adquieren una significación peculiar al ser leídos e interpretados desde la perspectiva del misterio pascual. Los Hechos de los Apóstoles nos hacen descubrir a la Comunidad primitiva, que ha nacido de la Pascua de Jesús, por la fuerza de su Espíritu, que la anima y mantiene en la unidad. Es la Comunidad, que ha nacido del agua y del Espíritu, la que se reúne, regularmente, para escuchar la predicación de los Apóstoles, la que celebra con gozo la fracción del pan, prolongando así la experiencia de las apariciones en la Eucaristía y espera, con ansiedad, la venida del Señor al final de los tiempos.

PASTORAL DEL TIEMPO PASCUAL

La importancia de este tiempo pascual deberá traducirse en:
1.-Ambientación de las celebraciones:
- por la abundancia de luces y flores 
- por la música de fondo antes de las celebraciones
- por la presencia del Cirio, encendido, adornado con flores.

2.-Estilo de las celebraciones:
- aspersión del agua, en vez del acto penitencial, cantando como recuerdo pascual del Bautismo.
- destacar la Plegaria Eucarística, cantando mucho: el Aleluya, el  Prefacio, el Santo, las aclamaciones, el Cordero de Dios, los cantos de Comunión y en la despedida final, a la Reina del Cielo.
- impartir la bendición solemne, al final de la Eucaristía, todos los Domingos.
- predicación con un tono pascual, invitando a vivir con alegría la salvación. 

3.-Un tiempo Sacramental por excelencia:
- es el tiempo apropiado para celebrar los Sacramentos de la iniciación cristiana: Bautismo, Eucaristía y Confirmación, haciendo entender a los fieles que los Sacramentos son participación de la Pascua del Señor, de su Muerte, Resurrección y efusión del Espíritu Santo.
- llevar la Comunión a los enfermos, los Domingos.
- celebrar, en una Solemne Eucaristía, la Pascua del Enfermo, administrando el Sacramento de la Unción.
- organizar y festejar encuentros comunitarios de los distintos grupos parroquiales o bien, con motivo de cumplirse algún aniversario. 

CONCLUSIÓN.-

En la Cincuentena Pascual, la liturgia nos invita a cantar y a dar gracias al Señor, por la Fiesta Universal, por la Victoria de la Cruz, por la Noche Bautismal.
La Pascua es la Novedad eterna, la fiesta de la luz donde la sala del festín se llena de invitados que celebran al Señor y cantan la alegría dada a luz en el dolor.
Para todos, mis más cordiales felicitaciones en estas fiestas de la Pascua del Señor.

Afectísimo en Cristo Jesús,
P.José Candelario Peralbo Ranchal, O.Carm.
Sevilla, 20 de Abril de 2025.









 

Comentarios

Entradas populares de este blog

NACIMIENTO DE UN BLOG